Hoy en día, existe un gran número de empresas que actúan como EFOS; de ahí, la importancia de verificar y asegurar que los CFDIs recibidos, principalmente, por parte de los proveedores.
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En estos tiempos, donde la autoridad fiscal refuerza sus mecanismos de vigilancia para encontrar diferencias y discrepancias en la Contabilidad de las empresas, cobra nuevamente relevancia la acción de revisar las Listas Negras del SAT.
El objetivo: cuidar muy bien con quien se tiene relaciones comerciales y estas cumplan todo el tiempo con las disposiciones de ley, evitando posibles conflictos con la autoridad fiscal.
Recordemos que las Listas negras del SAT reúnen los datos de los contribuyentes que tienen una situación fiscal irregular o que han realizado operaciones inexistentes o dudosas.
El inicio del riesgo fiscal
En 2014, el SAT se alineó con una reforma fiscal que autorizó publicar el nombre, razón social y la clave del Registro Federal de los contribuyentes que tienen una situación fiscal irregular.
Esto, de acuerdo con el Artículo 69-B del Código Fiscal de la Federación (CFF), el cual establece:
Cuando la autoridad fiscal detecte que un contribuyente emite comprobantes fiscales sin contar con los activos, ni con los medios para realizar operaciones que amparan tales comprobantes; se presumirá la inexistencia de las operaciones.
De tal modo, que a partir de este artículo se acuñaron dos términos bien conocidos por los contribuyentes: EFOS y EDOS, siglas que hacen referencia a las empresas que facturan operaciones simuladas y empresas que deducen operaciones simuladas, respectivamente.
Los EFOS motivan auditorías del SAT
Hoy en día, existe un gran número de empresas que actúan como EFOS; de ahí, la importancia de verificar y asegurar que los CFDIs recibidos, principalmente, por parte de los proveedores, no sea uno de estos.
De ser así, la empresa puede perder reputación y credibilidad comercial; además de ser incluida en las Listas Negras.
Otra de las consecuencias es que los comprobantes emitidos por los EFOS no tendrán ninguna validez fiscal. Entonces, las operaciones no serán deducibles de impuestos, incluso, tiene efecto retroactivo de 5 años.
Igual de grave, en términos contables y fiscales, la empresa se encontrará en una situación delicada; pues comenzará a ser objeto de observación por parte del SAT y sus aliados con el objetivo de revisar su comportamiento.
El negocio se encuentra en riesgo fiscal y en cualquier momento puede hacerse acreedor a una revisión electrónica; que en caso de complicarse derivará en multas o sanciones.
Por eso, es muy importante conocer en qué consisten las Listas Negras del SAT, quiénes están ahí y por qué se deben verificar.
En los negocios se tendría que hacer la identificación de:
- EFOS, pues son empresas que emiten comprobantes digitales (CFDI) de productos o servicios que no se entregan; o simplemente, no se realizaron. La finalidad es pagar menos impuestos.
- EDOS, en términos de operaciones empresariales, son “los clientes” de los EFOS; ya que emiten comprobantes para simular un aumento en sus gastos con el objetivo de disminuir sus obligaciones fiscales.
¿Cómo hacerlo?
Las Listas Negras del SAT actualizadas, pueden consultarse en la siguiente liga:
https://sppld.sat.gob.mx/pld/interiores/sppld.html
La consulta también se puede hacer de forma manual en el portal del SAT:
Ahí mismo, se indican los pasos y requisitos para hacerlo. También debes saber que estás se actualizan frecuentemente, por lo que los datos publicados pueden variar de una fecha a otra.
Verificar a todos tus proveedores antes de concretar una transacción es muy importante.
Esta actividad requiere invertir tiempo y recursos para verificar constantemente las operaciones comerciales de socios a fin de asegurar que no estén en Listas Negras.
La buena noticia es que existe tecnología que ayuda a automatizar ese proceso.
